El Espiritu del agua en África 3


 "LA CASA DEL SOL Y LA   LUNA" 
    
Hace muchos, muchos años, el Sol y el Agua eran grandes amigos y vivían juntos en la tierra. El Sol visitaba al Agua muy a menudo, pero el Agua nunca visitaba a su amigo el Sol. 
 
‐ Me he dado cuenta – le dijo un día el Sol – que yo siempre vengo a visitarte mientras que tú nunca vienes a mi casa. ¿Me puedes decir por qué?
‐ Está bien – dijo el Agua – el problema no es que no quiera visitarte.  
Es que tu casa no es suficientemente grande para mí. Si viniera a visitarte con toda mi familia, terminaría sacándote de tu propia casa.
‐ Entiendo – dijo el Sol ‐
‐ Muy bien – respondió el Agua ‐ si quieres que venga a visitarte, lo haré.Después de todo tú me has visitado muchas veces. El Sol fue inmediatamente a su casa, donde le esperaba su novia la Lunay le contó la promesa que le había hecho al Agua, y al día siguiente comenzó a construir un enorme jardín para recibir al Agua. Cuando terminó de construirlo, el Sol le dijo al Agua que ella y su familia estaban invitadas a su casa.
Al día siguiente el Agua y sus allegados, los peces y animales acuáticos, llamaron a la puerta de la casa del Sol y la Luna.
‐ ¡Aquí estamos! ‐ dijo el invitado.¿Podemos entrar sin problemas?
‐ Pueden pasar cuando lo deseen – respondió el Sol.
El Agua comenzó a fluir en el jardín del Sol y la Luna. En pocos minutos el nivel del agua llegaba a las rodillas del Sol y de la Luna,
Así que el Agua invitada preguntó:
‐ ¿Podemos continuar fluyendo? ‐ Seguro, no te preocupes– respondió el Sol.
– Que pase todo el que quiera.
El Agua continuó fluyendo dentro del jardín, alcanzando la altura de la cabeza de un hombre. El Sol y la Luna se miraron a los ojos y convinieron en que no había nada que hacer, así que le dijeron el Agua que entrase. Tuvieron que trepar hasta el techo porque quedaba poco espacio sobre el agua.
 Entró tanta Agua que pronto rebasó el nivel del techo y el Sol y la Luna tuvieron que salir y establecerse en el cielo, donde permanecen desde entonces.
Fabula Nigeriana de la cultura Efek‐Ibibo
KALUNGA
Originalmente Kalunga fue el dios ancestral de los lunda de Angola, Zaire y Zambia. Más tarde, se convirtió en un ser supremo, dios del cielo y de la creación. Él es el que todo lo ve y el que todo lo sabe, y es el juez de los muertos, cuyas decisiones se caracterizan por su compasión y sabiduría. Como dios de los muertos está relacionado con el inframundo y el mar.
KOSI
Fetiche de los pueblos del Congo, de carácter acuático, ya que de él depende la lluvia, el trueno y el rayo, la pesca y la navegación fluvial, medio principal de comunicación de un territorio exuberante, donde las selvas impenetrables borran todos los caminos. Este fetiche tiene forma de saco de arena cerrado con dos cuernos y plumas en la parte alta.
MBERE
En la mitología fen (En la zona oeste de Bantu), Mbere es el creador. Según cuenta la leyen-da él creó al hombre del barro, pero originalmente su creación fue un lagarto, a quien colocó en el gran mar de agua durante cinco días. Al quinto día, Mbere miró y vio al lagarto;
volvió a mirar al octavo día y el lagarto había desaparecido. Pero cuando el lagarto emergió del agua, era un ser humano, "Gracias" le dijo el hombre a Mbere.
El pueblo dogón, que habita en los abruptos roquedales de Bandiágara, al N. E. de la República de Malí, ha sido referencia obligada para los africanistas desde los primeros trabajos de Marcel Griaule, quien, por boca de Ogotemmêli, un viejo cazador ciego, nos desveló lo más profundo de su cultura: una cosmogonía y una visión simbólica del universo que impregnan todos los aspectos de la vida cotidiana. En el "Dios del Agua" Griaule, Impresionado por la riqueza y complejidad de los conceptos que le fueron revelados, quiso darles una difusión comparable a la de las mitologías antiguas, reivindicando las culturas africanas y rindiendo homenaje al anciano que fue el primero en tener la osadía de mostrar al mundo de los blancos una cosmogonía tan rica como la de Hesíodo, todavía vigente en nuestros días.
Para la mayoría de los Occidentales e incluso para muchos de sus vecinos, los Dogón son un pueblo de hombres peligrosos o por lo menos los más atrasados. Pero lo curioso es que su pensamiento puede aplicarse a cualquier africano Bantú. El estudio del pensamiento Bambara, vecinos de los Dogón responde a una metafísica ordenada similar, y hay muchos ejemplos en diferentes etnias de otras áreas africanas que lo demuestran. Podríamos hablar de la existencia de un pensamiento común Bantú. No en vano existe un sentimiento panafricano
Este tema no está acabado regresaremos a él próximamente en otras publicaciones.


 fragmentos del documental de Josu Venero y Rafael Carvajal. Producción DeAPlaneta 
Foto:  http://jessar.blogspot.com

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